El Maestro de la Orden el año pasado instituyó el mes de diciembre como Mes de la Paz para toda la Orden: “que cada mes de diciembre sea un mes dominicano por la paz para promover una solidaridad global dominicana con nuestros hermanos y hermanas que están tratando de llevar la esperanza en situaciones de violencia y la guerra” nos decía fray Bruno Cadoré. Se trata de sostener con la oración y la sensibilización la tarea de nuestros hermanos y hermanas que comparten vida y desafíos en algún rincón del mundo donde es necesario un proceso de reconciliación o de paz.
Toda la Familia Dominicana acogimos esta iniciativa que en su primera edición puso el foco de atención en Colombia y su proceso de paz. Este año la mirada de toda la Familia Dominicana al menos durante el mes de diciembre se dirigirá hacia la RD del Congo (África).
Este país ha pasado por décadas de guerras devastadoras con masacres y violaciones de los derechos humanos cometidas por fuerzas gubernamentales y numerosos grupos armados, con muchas potencias y empresas extranjeras están luchando para extraer los ricos recursos naturales del país. En este contexto aparentemente desesperado, donde millones de personas se vuelven extremadamente vulnerables, nuestros hermanos y hermanas dominicos están tratando de llevar esperanza, fortaleciendo la capacidad de las personas para convertirse en agentes del desarrollo sostenible y de la paz.
En este mes pues se nos anima tener presente la realidad de la República Democrática del Congo y el trabajo de nuestros hermanos y hermanas que alló construyen un mundo mejor.