31 de diciembre del 2019 y según nuestro calendario, el último día del año.

Normalmente este día del año nos gusta hacer revisión, echar una vista atrás y recordar todo aquello que vivimos ese año. Pero al mismo tiempo, nos encanta rápidamente hacer nuestra lista de propósitos que en ocasiones nunca cumpliremos porque no los trabajaremos. Entre medias necesitamos un periodo de tiempo, uno que nos permita agradecer todo lo vivido, cada oportunidad que se nos dió, las experiencias y reconocer en cada mal momento, el aprendizaje que había detrás. En este mundo que vivimos tan rápido, nos falta sentir y vivir. Es difícil establecer que comienza un año nuevo y llenarlo de nuevo propósitos, si se nos olvida disfrutar de los momentos que nos dan felicidad.

Dios nos puso un día en este mundo, en un momento concreto y nos pone cada día miles de oportunidades que aprovechar y vivir en plenitud. A veces tenemos que dejar el reloj atrás, no intentar controlar el tiempo y disfrutar de cada encuentro, de cada regalo de la naturaleza y de cada sorpresa que Dios nos pone. ¡No las dejes escapar!

Suena un poco tópico pero…¡cada día es un regalo! y nos quedan por delante muchos 366/365 días de años. Que seamos agradecidos y sepamos aprovechar cada oportunidad.

¡Gracias 2019! ¡Bienvenido 2020!

Belén Rodríguez Román.