El pasado 21 de junio dimos la bienvenida al verano y con él empieza el tiempo de descanso, los momentos de diversión y el cambiar la universidad por la playa. Pero… ¿por qué no? También es tiempo de hacer cosas diferentes.

En verano muchas personas aprovechan para hacer viajes, ir a los festivales de música que hay a lo largo de la geografía española, pero yo os propongo un plan más arriesgado: buscad un tiempo donde os deis a los demás.

Durante el curso muchas veces no se cuenta con el tiempo suficiente para hacer un voluntariado, es por eso os animo hacerlo ahora. Sé que es una actividad arriesgada pero fue participando en ella donde aprendí una lección de la vida: todo lo que no se da se pierde.

¿te atreves a participar?

Ángela Burguet