Si hay algo que de lo que está impregnada esta época del año diría que es la ilusión. Ilusión por ver a los que no vemos a lo largo del año, organizar la cena de Noche Buena, compartir tiempo con la familia, rehacer los nuevos propósitos para el año que viene e intentar cumplirlos. Ilusión por el día de Reyes Magos (para unos más que para otros) y no nos olvidemos de la lotería de Navidad.
Veo que la ilusión inunda la calles, sus luces, decoración, música, celebraciones, los puestos, las castañas. Oír en cualquier esquina un Feliz Navidad con una sonrisa, me hace pensar en cómo en cada uno de nosotros se enciende una pequeña chispa.
Yo para este año nuevo me propongo vivir todos los días con la misma ILUSIÓN. Una ilusión en mayúsculas que esté presente en lo que hagamos, con cada persona que nos crucemos y que podamos transmitir y vivir durante este año esa chispa que se enciende en Navidad.

Sara Márquez